Cuando se comercializa un medicamento, se organiza sistemáticamente un circuito de farmacovigilancia para gestionar los riesgos. Este implica a los profesionales sanitarios, a los Centros Regionales de Farmacovigilancia así como a la Agencia Nacional de Seguridad de Medicamentos. Estas acciones de control requieren una recogida de información muy amplia que tiene que ser analizada y clasificada de forma rápida para poder aportar acciones de corrección cuando sea necesario.
La tecnología Medication Shield se creó con un primer objetivo de simplificación de la gestión de notificaciones de efectos adversos para los equipos de farmacovigilancia en su trabajo cotidiano. Es una tecnología que desarrollamos desde 2018 en estrecha colaboración con la Red Nacional de Centros Regionales de Farmacovigilancia y la Agencia Nacional de Seguridad de Medicamentos.
De forma muy concreta, es el resultado de la alianza entre la pericia farmacológica de los CRPVs y de la ANSM y la pericia tecnológica de Synapse Medicine a favor de la seguridad de la población.